GAM presentó informe sobre violencia homicida en la niñez y adolescencia

El Grupo de Apoyo Mutuo (GAM) presentó este jueves su informe sobre la Situación de Violencia Homicida en la niñez y adolescencia guatemalteca, en el que destaca que a diario mueren por lo menos 16 personas, de las cuales al menos dos son menores de 19 años. La entidad humanitaria señaló que Guatemala es un país joven y que el más alto porcentaje de su población se encuentra contenido en niñez, adolescencia y juventud; esto podría ser una ventaja si el Estado invirtiera en la educación de esta niñez y adolescencia, pues tendría grandes profesionales en poco tiempo, pero también puede ser tomado como una debilidad, pues si el Estado no se preocupa por educar a esta juventud, pasa todo lo contrario, se convierte en un país violento. Asimismo, recuerda que el artículo 3 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia Decreto 27-2003 establece que es deber del Estado "promover y adoptar las medidas necesarias para proteger a la familia, jurídica y socialmente, así como garantizarle a los padres y tutores, el cumplimiento de sus obligaciones en lo relativo a, la vida, libertad, seguridad, paz, integridad personal, salud, alimentación, educación, cultura, deporte, recreación y convivencia familiar y comunitaria de todos los niños, niñas y adolescentes". La ley es clara al establecer que la obligación de brindar a un menor de edad todo lo que conlleva ser un ser humano, la tienen los padres o tutores por una parte, quienes trasladan los valores tanto morales como espirituales a sus hijos, pero también el Estado, creando políticas que les favorezcan. El GAM determinó que el promedio de muertes de menores de edad en el primer trimestre de 2016 ha sido de 76 mensuales y 20.5 diarios, debido a la violencia; durante este período el número de víctimas ascendió a 228, de las cuales cinco eran niños y una niña menores de un año; dos niños de 1 a 4 años; 5 de 5 a 9 años, 21 de 10 a 14 años y 194 adolescentes entre 15 y 19 años. De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Ciencias forenses (Inacif), se puede constatar que la mayor parte de las víctimas murieron por proyectil de arma de fuego, con 150; en segundo lugar fue asfixia por sumersión, con 31 casos y en tercer lugar la asfixia por suspensión, con 25 homicidios. La organización concluye que la niñez y adolescencia sufre de gran vulnerabilidad en el país, no solo por ser víctimas de violencia, sino por encontrarse en una etapa de la vida en la que necesitan de la guía de un adulto, y si esta persona que los guía no es un buen maestro, podría estar creando una bomba de tiempo. Finalmente, el GAM recomienda al Estado que se invierta más la niñez y adolescencia; que se fortalezcan las instituciones encargadas de velar por los niños y las niñas; que sea obligatorio construir centros de apoyo a niñez víctima de abusos y que se resuelvan los casos de muertes de niños y niñas, con el objetivo de establecer disuasorios que permitan disminuir este tipo de abusos.